sábado, 27 de noviembre de 2010
martes, 31 de agosto de 2010
Más lecturas importantes
Hace tiempo que he pensado que tendría que escribir un cuento como éste.
Se llamaría "Apartamento tomado",
Se llamaría "Apartamento tomado",
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apartamento tomado,
esfuerzo vano,
intendencia
miércoles, 18 de agosto de 2010
jueves, 29 de julio de 2010
Serendipia, casualidades y sueños
Mis compañeras blogueras volaron certeramente por el tercer entorno mientras yo –en cambio- anduve por zonas más terrestres. Sin embargo, eso no quiere decir que el tema no me interese.
Más de una vez he notado que lo que comúnmente llamamos “casualidades” tienen vínculos extraños que nos llevan a replantearnos situaciones. Casi todos hemos experimentado en alguna ocasión, alguna casualidad que aceptamos con una sonrisa. Por ejemplo, pensamos en una amiga o familiar que está lejos y recibimos-sorpresivamente- una comunicación de esa persona. O tenemos un sueño y lo comentamos jocosamente y a los pocos días ese sueño se viste de realidad. Cosas así. Los artistas suelen tener esos percances, sobre todo los que son enormísimos cronopios, como Julio Cortázar. Basta leer algunas de sus reflexiones para enterarnos de sus experiencias.
Como dice el dicho: “yo no creo en brujas, pero que las hay, las hay”.No nos neguemos a aceptar que la realidad tiene aristas desconocidas y que hay misterios que no hemos podido resolver aún. El sentido común es el que nos hace buscar denodadamente las explicaciones racionales. Pero, la línea que separa a la realidad de la ficción no es tan tajante. Lo que fue ficción en el siglo XIX, dejó de serlo en el siglo XX. Y lo que a veces soñamos, repentinamente, se puede convertir en realidad.
A mi me gusta pensar que mis sueños-los positivos, claro- algún día podrían convertirse en realidad.
Y no puedo negar que encontrar un tesoro oculto me vendría muy bien en estos malos tiempos que corren.
Lean este precioso cuento tradicional en la versión de Jorge Luis Borges, que no es la única, pero sí es una de las mejores. Y ¡a soñar!
¿Quién nos dice que es imposible que aparezca una fortuna en nuestra cotidianidad?
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Ciudadseva.com
Más de una vez he notado que lo que comúnmente llamamos “casualidades” tienen vínculos extraños que nos llevan a replantearnos situaciones. Casi todos hemos experimentado en alguna ocasión, alguna casualidad que aceptamos con una sonrisa. Por ejemplo, pensamos en una amiga o familiar que está lejos y recibimos-sorpresivamente- una comunicación de esa persona. O tenemos un sueño y lo comentamos jocosamente y a los pocos días ese sueño se viste de realidad. Cosas así. Los artistas suelen tener esos percances, sobre todo los que son enormísimos cronopios, como Julio Cortázar. Basta leer algunas de sus reflexiones para enterarnos de sus experiencias.
Como dice el dicho: “yo no creo en brujas, pero que las hay, las hay”.No nos neguemos a aceptar que la realidad tiene aristas desconocidas y que hay misterios que no hemos podido resolver aún. El sentido común es el que nos hace buscar denodadamente las explicaciones racionales. Pero, la línea que separa a la realidad de la ficción no es tan tajante. Lo que fue ficción en el siglo XIX, dejó de serlo en el siglo XX. Y lo que a veces soñamos, repentinamente, se puede convertir en realidad.
A mi me gusta pensar que mis sueños-los positivos, claro- algún día podrían convertirse en realidad.
Y no puedo negar que encontrar un tesoro oculto me vendría muy bien en estos malos tiempos que corren.
Lean este precioso cuento tradicional en la versión de Jorge Luis Borges, que no es la única, pero sí es una de las mejores. Y ¡a soñar!
¿Quién nos dice que es imposible que aparezca una fortuna en nuestra cotidianidad?
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jueves, 22 de julio de 2010
Canción para el recuerdo
Hace tiempo que no incursiono en este blog.
Esta noche, hace frío. El invierno, se presentó con toda su crudeza.
Es una noche para escuchar boleros.
Espero que les guste la selección.
Esta noche, hace frío. El invierno, se presentó con toda su crudeza.
Es una noche para escuchar boleros.
Espero que les guste la selección.
jueves, 1 de abril de 2010
Otoñando
Llegó por fin el otoño.
Más allá de las diferencias con nuestros hermanos mayores,-me refiero a los argentinos-, tenemos con ellos, muchas cosas en común.
No se trata de saber de quién son; son compartidas y además, la propiedad no es lo más trascendente porque, de alguna manera, nos han servido para unirnos en los diferentes exilios. Por otra parte, cuando algún uruguayo decide triunfar artísticamente, lo primero que hace es "cruzar el charco" y buscar el éxito "en la vecina orilla". El río nos separa y al mismo tiempo, nos une.
Por lo tanto, tenemos en común el tango, el dulce de leche,el fainá, las estaciones y por supuesto, la melancolía de la época otoñal.
Compartimos esta sensación con uno de los grandes e inigualables músicos rioplatenses, el maestro Astor Piazzolla.
Más allá de las diferencias con nuestros hermanos mayores,-me refiero a los argentinos-, tenemos con ellos, muchas cosas en común.
No se trata de saber de quién son; son compartidas y además, la propiedad no es lo más trascendente porque, de alguna manera, nos han servido para unirnos en los diferentes exilios. Por otra parte, cuando algún uruguayo decide triunfar artísticamente, lo primero que hace es "cruzar el charco" y buscar el éxito "en la vecina orilla". El río nos separa y al mismo tiempo, nos une.
Por lo tanto, tenemos en común el tango, el dulce de leche,el fainá, las estaciones y por supuesto, la melancolía de la época otoñal.
Compartimos esta sensación con uno de los grandes e inigualables músicos rioplatenses, el maestro Astor Piazzolla.
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Otoño,
Río de la Plata
viernes, 5 de febrero de 2010
Cuando un amigo se va
queda un espacio vacío. Se nos fue también Tomás Eloy Martinez, el argentino universal. Cada vez que se va algún escritor querido siento que pierdo a un amigo entrañable, aunque nunca lo haya visto personalmente. El año pasado, Mario Benedetti, Idea Vilariño. Los dos uruguayos universales. Ahora Tomás Eloy. Extrañaré muchísimo no leer más sus artículos en la Nación, ya siento la tristeza del espacio vacío.
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amigos,
espacios imposibles de llenar,
pérdida
domingo, 17 de enero de 2010
¡Feliz año nuevo para todos! Aquí va una imagen para ponderar las virtudes del libro-aunque hay gente que cree que es una especie en extinción- Yo creo que no es así. Es probable que se transforme, y que -de manera camaleónica- sobreviva de todos modos para darnos la felicidad de la lectura "sin enchufes", eternamente.
Cariños y hasta prontito.
Alfa S.
Cariños y hasta prontito.
Alfa S.
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